“Lo que escuchamos ante la ventana” 2018.
Proyecto sonoro de Luis Gonzáles Palma y Sebastián Szyd.
Partiendo de las ideas que John Cage desarrolló sobre el silencio y el sonido a lo largo de su Carrera, y retomando dos antecedents en relación a pensar el sonido de la cámara: “El click es el sonido de la muerte” de RolandBarthes, y la obra de Iñaqui Bonillas: “10 cámaras documentadas acústicamente” (1998), donde el fotógrafo mexicano registró el sonido del disparador de diez distintas cámaras analógicas, (Proyecto que el curador y escritor independiente Paul Wombell considera como una reflexión sobre “la voz”, de la cámara), pensamos en trasladar parte de la experiencia de la toma fotográfica al terreno sonoro, enfatizando que en el accionar mecánico de la cámara, la escucha es parte fundamental dentro del proceso de la construcción de una imagen.
“Lo que escuchamos ante la ventana” se basa en dos registros. El primero, la grabación del sonido del ambiente donde hicimos las tomas, (cantos de pájaros y variados sonidos naturales). El Segundo, la grabación de todos los sonidos emitidos por una cámara fotográfica, una Pentax 6×7 – 120 mm, al momento de oprimir el disparador. Grabamos el sonido de sus círculos electrónicos, así como el que se genera con el arrastre de la película, el sonido hasta un Segundo. Todos los sonidos naturales mezclados con los mecanísmos y eléctricos de está cámara han sido la materia prima para generar un paisaje sonoro que intent desplazar la experiencia de la toma fotográfica hacia un horizonte dónde la escucha tiene mayor jeraquía de lo visual. Estamos convencidos que el sonido emitido por la cámara es parte fundamental en la narrative de una imagen, focalizar la atención en este aspect desplaza a un Segundo plano la potencial imagen que se desea plasma.
En una cámara reflex jamás se ve la imagen de la toma, el movimiento del espejo lo impide por muy extensor que este sea. Nunca vemos lo que deseamos registrar, ese instante es invisible a nuestros ojos pero perceptible a nuestros oídos. Para nosotros, el acto fotográfico también es sonoro, se concentra más en los sonidos del aparato tecnológico que deja entrar la luz que afecta la película sensible, que en la imagen que queda latent en el negative. Es un momento de encuentro abierto a multiples percepciones.
Queremos plantear que el gesto de accionar este mecanísmo mecánico – eléctrico es un gesto de contemplación Sonora, una escucha a través de los ojos.
En síntesis, como idea fundamental, este Proyecto trató de fotografiar el sonido, y transform nuestra idea de imagen en un instante temporal cargando de ecos, resonancias, texturas y silencios, es decir, encanto.
LGP
Queremos agradecer especialemente a Gabriela De Oliveira por habernos dado el título de esta obra y por sus precisas reflexiones en relación al presente texto.
